Utilizamos “Google reCAPTCHA” (en lo sucesivo “reCAPTCHA”) en nuestro sitio web. Con reCAPTCHA comprobamos si es una persona o un ordenador quien hace ciertas entradas en nuestros formularios de contacto o de boletines. Con reCAPTCHA contrarrestaremos el aumento de registros mediante máquinas en cuentas de usuarios y boletines de noticias. En la actualidad, reCAPTCHA es la mejor protección frente a esa clase de ataques (ataques procedentes de robots).
En cuanto usted accede al sitio web, reCAPTCHA analiza sus interacciones mediante las siguientes características:
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Dirección IP del dispositivo terminal utilizado.
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Fecha y tiempo pasado en el sitio web.
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Movimientos con el ratón en las superficies de reCAPTCHA y tareas que exigen la identificación de imágenes.
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Datos de identificación del navegador y del tipo de sistema operativo utilizado.
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Cuenta de Google, si ha iniciado sesión en Google.
Los datos recabados durante el análisis se envían a Google. Según las indicaciones de Google, Google no utiliza la información recabada por reCAPTCHA para publicidad personalizada.
Renovación de contraseñas
Es la batalla de siempre contra nosotros mismos. El uso durante años y años de la misma contraseña. Y más grave aún: la misma contraseña para todas las cuentas.
Hasta que no ocurre un descalabro, no nos obligamos a hacer algo tan simple como cambiar las contraseñas de nuestras cuentas con cierta periodicidad. Solamente cuesta un minuto de tiempo y evita muchas lamentaciones.
Porque el peligro no está solamente en nuestro ordenador o en nuestro móvil, sino también en la interceptación de las transmisiones o en los ataques a los servidores en donde se alojan esas cuentas (de correo, redes sociales, tiendas online, bases de datos…) y de los que muchas veces no nos enteramos a tiempo, o no nos enteramos nunca. Y esos servidores sí son muy golosos para los piratas informáticos.
Si el problema es que no vamos a ser capaces de recordar una contraseña si la cambiamos con frecuencia, o varias si tenemos varias cuentas, existen aplicaciones de seguridad para contraseñas que las recuerdan por nosotros y son gratuitas o muy económicas. Y basta con recordar una sola contraseña maestra para gestionarlas todas y poder cambiarlas con la frecuencia necesaria para que sean seguras.
Si le interesa saber más sobre este asunto, no dude en consultarnos y le informaremos con mucho gusto. No deje que su propia desidia ponga en peligro todo su mundo.